La Asociación Medica Peruana  conciente de la importancia de la participación de todos los colegas médicos en el debate sobre el futuro de la salud y la seguridad social en el Perú, cumple con publicar el articulo de opinión escrito por el Dr. Guillermo Terry Valverde, que enjuicia desde su particular punto de vista la propuesta sobre el Sistema Único de Salud en el Perú, la creación de la una nueva república y el deseo de lograr la seguridad social para todos los peruanos; asimismo plantea la recuperación del rango constitucional y el nombre de IPSS para la seguridad social y la derogatoria de la ley 27690, Ley de Modernización de la Seguridad Social y de creación de las AFPs.


Hacia una Seguridad Social para todos los peruanos

El sistema neoliberal ( “ capitalismo salvaje” )  que se nos ha impuesto, que pisotea la dignidad de las personas y al mismo tiempo que lo utiliza demagógicamente para incrementar la acumulación de la riqueza en manos de pocos, es deliberadamente incapaz de preocuparse de la Salud en tanto derecho humano y “ supremo fin “ .

La salud es indispensable para el ser humano porque es el sustento de su fuerza de trabajo productor de riqueza, que también se agota y se fatiga por el trabajo diario.

La explotación del trabajador, el despido de su centro laboral, la pérdida de sus derechos laborales, la desocupación y peor aún, cuando los niños se tienen que ver obligados a trabajar; en fin, cuando la salud se pone al servicio de mayores utilidades, se está creando las condiciones para enfermarse si a esto le añadimos la pobre alimentación de la mayoría de peruanos.

Lo más terrible e infame que este sistema hace, es poner al mercado la enfermedad que el mismo produce, dando lugar a la vez a negocios de otros sectores.

Por todo lo anterior es importante puntualizar que la salud no es sólo problema que compete al sector (Ministerio de Salud, Seguridad Social, Fuerzas Armadas y Policiales, Actividad Privada, hospitales, policlínicos, postas, etc más los trabajadores involucrados) sino que compete también a la misma población en el propósito supremo de estar sana física, biológica y socialmente como garantía de desarrollo humano y de supervivencia. Por eso es que la salud es un problema político que requiere solución.

En nuestro país existe un Sistema Nacional Coordinado de Salud que no es ni sistema, ni menos coordinado manteniéndose por décadas y viendo desde el balcón que la salud del pueblo peruano ha ido decreciendo (indicadores que nos ubica en los últimos lugares de América Latina) y lo que es peor, la atención de salud es actualmente inequitativa y por tanto injusta, pues se atienden bien los que bien pagan, mal los que poco pagan y se mueren los que no pueden pagar. Es pues imperativo que la atención de salud se otorgue sin discriminación alguna y para toda la población.

Para este gran cometido nacional es preciso organizar un Sistema Nacional de Salud Único donde el Ministerio de Salud sea el Órgano Rector y la Seguridad Social su Órgano Efector.

Mantenemos la esperanza de que alguna vez el pueblo obligue a realizar cambios que tienen que hacerse en todos los sectores para forjar una Nueva República, verdaderamente democrática, donde la ley sea para todos igual y donde aprendamos a respetarnos entre nosotros. Incluye también, por las razones antes expuestas, un cambio total en Salud.

Este gran cambio radical tendrá lugar cuando se inicie un proceso en el cual todos los peruanos estemos protegidos por una Seguridad Social como Institución que no sólo se ocupe de restablecer la salud a quién la ha perdido sino que atienda también otros riesgos inherentes a la persona humana como desocupación, vejez, orfandad, pensiones, accidentes de trabajo, enfermedades profesionales e invalidez.

La Seguridad Social concebida como Doctrina y como Derecho en la Declaración Universal de los Derechos Humanos crecerá y se hará cada vez más fuerte en tanto aumente la población laboral  con la erradicación de la injusta situación de los trabajadores eventuales y que con el aporte de todos ellos( Principio de Solidaridad) podrán tener atención integral(Principio de Igualdad) y en forma progresiva para todos los peruanos sin discriminación(Principio de Universalidad) y cuando un Estado solidario que alguna vez tendremos, asuma su obligación en Salud.

La Seguridad Social deberá recuperar su rango constitucional y su nombre IPSS (Instituto Peruano de Seguridad Social) eliminado por la Constitución de 1993 para los propósitos del  prófugo dictador, entre ellos para desaparecer la cuantiosa deuda del Estado al IPSS cambiándole de nombre por ESSALUD(Desaparecido el acreedor se acabó la deuda). Deberá también derogarse la ley 26790 llamada irónicamente “ Ley de Modernización de la Seguridad Social en Salud” que sirvió para entronizar servicios privados de atención de salud pero con dineros de la misma Seguridad Social( 25% de sus ingresos van a las Empresas Prestadoras de Salud-EPS) y la creación de las AFP(Administradora de Fondos Pensionarios) de las que actualmente la mayoría de  los cotizantes trabajadores quieren libertarse, pues fueron engañados por una propaganda nunca vista en la televisión peruana y que tienen los sueldos mas bajos. Esta misma ley dejó los Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales para el negocio de empresas privadas.

No deben asustarse pues las empresas privadas que intervienen en el sector. La Seguridad Social manejada con honradez que no hay, con gente capacitada, con conocimiento y mística institucional (no los amiguitos o amigotes de los gobiernos de turno) podrá contratar los servicios privados sin necesidad de intermediarios que sólo persiguen afán de lucro.

He dejado para el final, por ser lo mas importante: La Seguridad Social debe llevar acabo una política prioritaria en PREVENCION Y PROMOCION DE SALUD, único modo de optimizar la atención en nuestros hospitales, llamados por algunos y con razón” Palacios de la Enfermedad”, pues el gasto en estos establecimientos para recuperar la salud de quienes llegan ya enfermos será con el tiempo insostenible sino se hace la prevención de enfermedades. Aquí es donde nuestro pueblo, lejos de los hospitales, deberá intervenir activamente en las acciones de mantenerse sanos y cuando no, hacer que sus enfermedades estén controladas por mucho tiempo. Sin esta imprescindible tarea la atención en todos nuestros hospitales será mas deficiente por el alto costo cada vez creciente así como por la superpoblación enferma que también va en aumento.

Dr.Guillermo Terry Valverde
Ex-Presidente del Cuerpo Médico del Hospital Almenara y de La
Asociación Médica del Seguro Social del Perú (AMSSOP)